Diferencias entre la marihuana fotoperiódica y marihuana autofloreciente ¿Cuál elegir?

En el mundo cannábico existe una gran cantidad de cepas, cada una con características particulares, de la cual, puedes elegir la que más se adapte a tus necesidades.

Entre las genéticas más buscadas se encuentran la marihuana fotoperiódica y la marihuana autoflorenciente, pero, ¿en qué se diferencian estos dos tipos de cannabis?, pues bien, si te interesa conocer la respuesta, sigue leyendo este post para que te enteres.

Marihuana autofloreciente

Por lo general, los cultivadores prefieren este tipo de cannabis porque es mucho más fácil de cultivar, además estas variedades crecen con mayor rapidez, por lo que es una opción ideal para aquellos cultivadores que desean obtener su cosecha lo antes posible. Estas cepas florecen independientemente del ciclo de luz al que están sometidas.

Las auto se caracterizan por ser más pequeñas que las variedades fotoperiódicas, por lo que son perfectas si estas buscando discreción y su tamaño pequeño permitirá que cultives más plantas en un espacio determinado. Lo único negativo es que producen cosechas menos abundantes.

Por su genética ruderalis, las plantas auto son mucho más resistentes, por lo que son ideales para los cultivadores novatos.

Marihuana fotoperiódica

Las plantas de cannabis fotodependientes son variedades mucho más difíciles de cultivar porque requieren de un cambio en el ciclo de luz para empezar a florecer, por lo tanto, necesitan mayores cuidados.

Este tipo de cepas tardan más en llegar a la cosecha que las variedades autoflorecientes, pero la productividad es mucho más grande y el tamaño de las plantas también, además tienen un contenido mayor de cannabinoides.

Estas variedades se clasifican en dos subespecies: índica y sativa, por lo que el crecimiento de estos tipos de cannabis variará. Por lo general, las sativas pueden llegar a alcanzar los 3 m, mientras que las índicas pueden tener un tamaño de 1 y 1,5m.

¿Cuál elegir?

La decisión de cultivar entre marihuana autoflorenciente o fotoperiódica dependerá de las necesidades que tengas como cultivador. Ya conoces algunas de las diferencias entre estas dos genéticas, así que, manos a la obra y elije la que más se adapte a ti.