Legisladores solicitan un cambio en la política de la marihuana, luego de la suspensión de Sha’Carri Richardson de los Juegos Olímpicos

Después de que se dio a conocer la noticia de que la corredora estadounidense Sha’Carri Richardson no competirá en los Juegos Olímpicos de Tokio tras ser sancionada por dar positivo a un test de marihuana, las reacciones de los diferentes sectores políticos y deportivos no tardaron en llegar.

Por ejemplo, un grupo de 18 legisladores del Congreso firmaron una carta condenando la suspensión de la velocista y solicitaron que los órganos rectores del deporte realicen un cambio de política para evitar que esas situaciones se repitan.

Específicamente los legisladores le piden a la Agencia Antidopaje de los Estados Unidos (USADA, por sus siglas en inglés) que elimine la marihuana de la lista sustancias prohibidas.

La carta establece que si bien los legisladores están de acuerdo en que los atletas «no deben estar bajo la influencia de ninguna sustancia durante la competencia”, éstos exponen que no apoyan que “el cannabis deba incluirse en la lista y que el uso previo en la vida privada de un atleta debe ser motivo de sanción».

La joven de 21 años, admitió que consumió cannabis (en un estado donde el uso de la planta es legal), para sobrellevar la muerte de su madre biológica.

Poco después de que ganara en junio las pruebas preolímpicas en Oregón dio positivo por THC, una de las sustancias químicas de la marihuana, por lo cual, a la atleta le anularon sus resultados y la suspendieron durante un mes.

Esta situación también provocó reacciones entre las entidades deportivas como el caso del USA Track & Field, quien esta semana dijo que la política internacional sobre castigos por cannabis para los atletas «debería ser reevaluada».

La marihuana continúa estando prohibida en la lista de las disciplinas olímpicas. Sin embargo, otras organizaciones deportivas profesionales como la NFL, MLB y NBA han cambiado un poco su perspectiva y han flexibilizado sus reglas sobre la marihuana.