¿Ingerir o inhalar cannabis?

Cada vez más crece el número de consumidores de cannabis, y por supuesto, cada uno tiene gustos diferentes a la hora de consumir esta planta, por lo tanto, prueban distintos métodos como inhalarla o ingerirla, pero, ¿cuál prefieres tú?, si aún no te decides, aquí te presentamos algunas de las diferencias que existe entre estas dos alternativas:

EL THC se absorbe distinto

Cuando se inhala el cannabis, el THC viaja directamente al cerebro, por este motivo, los efectos de la planta fumada o vaporizada se aceleran más rápido y disminuyen más pronto. Mientras que cuando se ingiere la marihuana, se metaboliza de otra manera. El THC se absorbe por el estómago, pasa por el hígado, que lo convierte en 11-hydroxy-THC, un metabolito, que provoca una intensidad más elevada.

Efectos y dosis determinada

Cuando se ingiere la marihuana resulta más complicado determinar la dosis adecuada, ya que después de ingerir esta planta, los efectos suelen ser más retardados, y los consumidores pudieran llegar a superar la dosis ideal. En cambio, cuando inhalamos el cannabis, los efectos se sienten casi instantáneamente, factor que permite que los consumidores tengan mayor control de la dosis.

Si consumes comestibles lo recomendable es empezar con pequeñas dosis y ser paciente, pues los efectos tardan y por lo general son corporales y más fuertes.

La alternativa más saludable

Una de las opciones más saludables actualmente son los comestibles, cada vez más son las personas que se interesan por este método. Incluso, es una de las alternativas recomendadas cuando se habla de consumo terapéutico, ya que sus efectos son más prolongados, y proporciona un alivio más duradero