Cura tus cogollos fácil y correctamente

Si eres cultivador de cannabis seguramente sabrás que el trabajo no termina luego de sembrar las plantas, posteriormente, hay que realizar un proceso de curación para poder disfrutar de las bondades del cannabis, es por ello, que te indicamos cómo hacerlo de manera efectiva.

¿Por qué es tan importante curar los cogollos de marihuana?
El proceso de curado, aunque para muchos puede resultar molesto, permite la degradación de subproductos generados por el proceso de secado de la planta los cuales dejan un sabor desagradable. En este sentido, al realizar la curación se podrá producir un humo suave.  Además este proceso previene que aparezca el moho, por lo que la planta puede durar más tiempo.

Antes de realizar la curación es indispensable primero secar y hacer una manicura de la marihuana, sobre esto último existen dos maneras para realizarlo:
1) El manicurado en fresco: cuando podamos los cogollos luego de la cosecha.
2) El manicurado en seco: cuando recortamos la planta posteriormente al secado y antes de su curación.

Una vez cumplidos con estos dos pasos antes mencionados, debes seguir los siguientes consejos para curar tus plantas de la manera correcta:

1. Busca unos tarros que sean herméticos para que deposites tus cogollos. Al escogerlos, asegúrate que la apertura del frasco sea grande para que puedas introducir tu mano y para manipular los cogollos fácilmente. Procura no llenar demasiado el frasco para poder mover el contenido ocasionalmente y que pueda pasar el aire entre los cogollos.

2. Revisa el frasco regularmente, puedes abrirlo una vez al día o una vez a la semana para controlar su evolución. Es ideal que dejes la tapa abierta por al menos unos minutos, hay quienes recomiendan que puede ser por una hora. De todas formas afirma que no tengan moho.

Sigue estos sencillos pasos hasta alcanzar el mes de curado y recuerda hacerlo en un lugar oscuro y fresco. Solo ten paciencia.